Nada más tres mil 537 millones 447 mil 300 pesos gastó el gobierno de Enrique Peña Nieto el año pasado en echar andar algunos programas de la Reforma Educativa. Datos duros de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) aseguran que esos progresos son pírricos, “marginales”. Y es que, al prestar cuidado al informe de la ASF, los programas de autonomía escolar, bebederos escolares, Reforma Educativa, inglés en las escuelas y capacitación a docentes dejan mucho que desear; es más, el propio auditor Superior de la Federación llegó a la conclusión que hubo solo “avances marginales”.
No se construyeron los bebederos que se habían prometido y se detectó que se pagó capacitación a maestros que no existió. Tan sólo en la cuenta 2017, el auditor especial encontró que se gastó 13 millones 833 mil pesos para el pago de 16 cursos de capacitación para docentes de educación básica y media superior, «los cuales no cuentan con la documentación que acredite su impartición, así como la población objetivo que resultó beneficiada con dichos cursos».
Eso tenga por seguro que sólo es la punta del iceberg, habrá sorpresas más adelante. Ah, y otra cosa, tenga la certeza que el nombre de Aurelio Nuño Mayer dará mucho de qué hablar. Sólo recordemos que el 27 de agosto de 2015, Nuño Mayer se convirtió en el responsable de la Secretaría de Educación Pública, con la encomienda de implementar la Reforma Educativa. Éste dejó su cargo el 6 de diciembre de 2017 para sumarse a la campaña del precandidato presidencial José Antonio Meade Kuribreña. Hoy se encuentra desempleado.
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