Ya dejó de ser gracioso esto de la ineptitud del alcalde Hipólito Rodríguez. Primero con sus empleados importados de otros lares que resultaron unos patanes, luego sus constantes reculadas, pero hasta ahí todo tenía que ver con su poco carácter y la imposición de empelados desde México. Sin embargo, después de lo que pasó en Plaza Ánimas, los dichos de Hipólito le desgraciaron el presente a muchos empresarios y empleados, luego los baches y la espera del chapapote que no termina de regalarnos Pemex y ahora esto de la basura que es un problema mayúsculo.
Sobre este último tema resulta que el problema no es de Hipólito Rodríguez, el problema es de todos nosotros. Si la recolección de basura en Xalapa se detiene porque no hay donde arrojar los desechos sólidos, en una semana Xalapa va a estar inundada de basura, de nuestra basura. Ante esto los ciudadanos debemos ser más conscientes. Desde casa debemos ir reciclando la basura, debemos separar los desechos orgánicos de los inorgánicos. Los que podamos debemos utilizar los desechos inorgánicos para hacer composta y el cartón y plástico separarlos para llevarlos a empresas donde los reciclen.
Lo menos que debemos hacer es echar nuestra basura a la calle, lo menos que debemos hacer es quemar la basura. Si el alcalde ha demostrado que no puede administrar esta ciudad, vamos a empezar a administrarnos desde casa. ¡Pongámosle el ejemplo!
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