Édgar Hernández* /
¡A 100 días del final!
Binhard Innovation S. A. de CV, empresa multinacional contratada por el gobierno de Miguel Angel Yunes para “timbrar” la nómina de los 19 mil empleados de la Secretaría de Salud, admite por escrito repetidos “errores” quincenales y mensuales en los depósitos de pago de empleados que cobran (sin cobrar) sumas que podrían alcanzar los 500 mil pesos.
En el Sector Salud está la punta de iceberg de los desvíos irregulares de los salarios de los empleados al servicio del Estado que en una sumatoria –de documentarse el ilícito- podrían alcanzar los mil 200 millones de pesos.
El “error” en el timbrado (autorización) de la nómina de la Secretaría de Salud se desvela al ponerse al descubierto la “Nómina Fantasma” de Binhard Innovation, con Registro Federal de Contribuyentes BIN150602HBo.
Binhard es la misma empresa contratada por los gobiernos de Fidel Herrera y Javier Duarte para dicho timbrado.
Una carta aclaratoria enviada por José Francisco Delgado Grajales, Director de Recursos Humanos de Binhard Inovation al secretario de Salud de Veracruz, Arturo Irán Suárez Villa admite el repetido “error” en el timbrado de la nómina (facsímil de la carta anexo).
Dice la misiva:
“Por error fueron timbrados diversos CFDIS (ilegible) a nombre de trabajadores que no forman parte de la empresa, sino que son aspirantes de un proceso de capacitación que se llevó a cabo durante el mes de marzo y abril (sic) de 2017”.
El ilícito en el timbrado, según Binhard, se registra cuando uno de quienes no son sus empleados “carga una base de datos que aparentemente descargó (sic) de internet”.
Esas apariencias que argumenta Binhard, sin embargo, resultan engañosas ya que no es posible que las nóminas de los 182 mil empleados de gobierno se puedan localizar con una búsqueda cualquiera por internet.
Es decir, en los hechos, es punto más que imposible accesar a las nóminas y “timbrarlas” así acomodarlas en favor de los intereses de Binhard.
Imposible además que cualquier usuario o empresa se encuentre de casualidad la nómina, puestos y salarios y autorice salarios anuales que aparecen en una nómina y que jamás fueron pagados al trabajador.
Para Binhard no hay violación a la Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares, ya que todo fue producto de una “aparente descarga en internet”, realizada por uno de sus capacitados.
Así, para este negocio fue fortuita la localización de la base de datos en internet.
Sin embargo, fortuita y todo, así la descargó e instaló en su sistema de “timbrado” de nómina, falla que repite –por supuesto en su favor- “en más de una ocasión”.
Y es que, según Binhard “al no haberse eliminado (el error) quedó cargado en nuestro sistema y por tratarse de un sistema (sic) automatizado de manera mensual se estuvieron generando dichos recibos de nómina”.
La empresa señalada sostiene por escrito que jamás percibió que los recibos de nómina estaban alterados.
Simplemente no se dio cuenta del “error” sucedido en marzo-abril del año anterior hasta que el 17 de noviembre cuando 10 trabajadores del Sector Salud descubren ingresos no percibidos.
Difícil pues de creer que hubieran transcurrido 10 meses sin que Binhard percibiera anomalías en el timbrado de la nómina al igual que el clima de incertidumbre que empezó a generarse al interior de la Secretaría de Salud tras detectarse los nombres de empleados estatales incluidos en “Nóminas Fantasma”.
La sospecha de la transa estalló al exigir el sindicato del Sector Salud el status el reporte de ingresos de los 19 mil trabajadores que sirven a la dependencia.
Reclamaron asimismo al SAT diera a conocer las declaraciones anuales de los burócratas para saber de cuánto dinero se había desviado por el “timbrado” supuestamente erróneo de la nómina de Binhard.
Al respecto, el secretario General de la Subsección 50/26 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, Carlos Alberto Sarmiento Torres, denunciaría que en todo el Estado la doble nómina es una situación generalizada.
Ello daría lugar a que el SAT iniciara un “barrido” en sus cuentas para limpiarlas del doble pago e iniciar al mismo tiempo a través de la PGR, las indagaciones correspondientes.
Hasta la fecha la Secretaría de Hacienda no ha informado oficialmente cuántos empleados tendrían movimientos de supuestos pagos no realizados por las “Empresas Fachada”.
Ya por lo pronto, el SAT está dando asesoría a personal de las oficinas centrales de la Secretaría de Salud de Xalapa, el Centro de Cancerología del Estado y el Instituto de Salud Mental, para verificar si tienen pagos vía nómina por diferentes cantidades a lo que devienen.
Mientras la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente reporta al corte de abril de este año mil quejas por declaraciones anuales irregulares. Los contribuyentes, según la dependencia, no reconocen ingresos o presumen que fueron timbrados de manera equivocada.
Así, a escasos cien días de la entrega recepción del gobierno de Yunes Linares a Cuitláhuac García, de entrada son tres las “Empresas Fantasma” involucradas en transacciones irregulares que cubren el timbrado de las nóminas de Salud, Seguridad Pública y Protección Civil.
La SEV, hasta donde se pudo conocer, tiene un sistema propio que data desde la época de Miguel Alemán.
Y para el caso particular de los trabajadores de la SS en Poza Rica, hay denuncias de la burocracia que cobra en al menos seis empresas que no conocen.
Ahí aparece, de nueva cuenta Binhard y una empresa fachada denominada Ounkuos México SA de CV.
Para “Empresarios SOS”, que lidera Jesús Castañeda quedan al descubierto proveedores fachada en el timbrado de nóminas con salarios para los trabajadores que nunca llegaron, pero que extrañamente sí figuraban en sus estados de cuenta bancarios.
¿Por qué no hubo reclamo en su momento?
Al no representar afectación directa a su salario “normal”, los trabajadores no hicieron reclamo a la institución bancaria y solo reaccionaron cuando la autoridad hacendaria les requirió la aclaración por su extraña relación laboral en varias empresas, sin el debido cumplimiento del pago de impuestos correspondientes, más lo que se acumule en materia de multas y recargos.
El robo de identidad con millonarias ganancias, es presuntamente para el gobierno de Veracruz, el negocio del siglo.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo
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