Siendo “personal” de Gabriel Deantes se explica la reticencia de Yolli García para no entregar los convenios publicitarios de los tiempos de Javier Duarte, que ya le entregaron los de Comunicación Social actual. La solicitud la hizo Naldy Rodríguez, a la que sólo le notificaron que podía ir a revisar la documentación, pues ellos no van a entregar nada ni piensan hacerlo público; ¿dónde está entonces el acceso a la información?
Esta renuencia de la directora del IVAI, primero por retrasar el trámite y luego por negarse a entregar la información pública, sólo se explica si entendemos que ella recibe órdenes de Gabriel Deantes. ¿Qué información existe en esos documentos que no quieren que se hagan públicos? ¿Acaso también aparecen medios de comunicación fantasma? ¿Acaso aparecen ahí algunos de los que todavía reclaman pagos al gobierno?
Yolli García debe entender que como funcionaria pública se debe a los ciudadanos que con sus impuestos pagan su sueldo; claro, a menos que Gabriel Deantes le pague más.