Primero fue Ricardo Alemán, ese que se atrevió a sugerir que algún fanático asesinara al entonces candidato López Obrador; ese que al final, lloriqueando, responsabilizaba a AMLO de lo que sucediera a su persona. Otros que también se excedieron y que en estado alcoholizado injuriaron al candidato de Morena, como Toño Esquinca, decidieron darse un “descanso”.
En el caso de Milenio, Carlos Marín, quien fuera 19 años su director editorial, pasará a la asesoría de la presidencia ejecutiva de la empresa. Marín se destacó por atacar desde la elección de 2012 y 2018 a López Obrador. Pablo Hiriart, otro de los injuriadores del tabasqueño, lanzó por Twitter este mensaje: «Carlos Marín deja la dirección de Milenio y mañana es la última emisión de Carlos Ramos Padilla en ABC radio, después de 17 años. Quién sigue?», aludiendo a que el próximo régimen presidencial obliga a estos cambios.
No señor Hiriart, esto no es consecuencia de la llegada de López Obrador a la Presidencia, esto se llama la ley de la retribución, lo que uno siembra, eso es lo que cosecha; y usted sembró mucho, espere una gran cosecha.
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