Bartlett Díaz tiene un historial muy oscuro. No sólo es la caída del sistema del 88, sino además su posible responsabilidad en la muerte de Manuel Buendía, columnista de muchos periódicos de su época. José Antonio Zorrilla Pérez era jefe de la Dirección Federal de Seguridad y su jefe directo era Manuel Bartlett, secretario de Gobernación. Zorrilla Pérez era el emisario de Bartlett, como bien lo describe Julio Scherer en su libro Los presidentes. José Antonio Zorrilla estuvo 24 años en la cárcel por el asesinato de Manuel Buendía.
Para muchos quedaba claro quien había sido el autor intelectual; Zorrilla Pérez no se mandaba sólo. ¿Se ha redimido Manuel Bartlett y ahora transita por la senda de la izquierda limpio de pecados? ¿El poder sanador de Andrés Manuel López Obrador lo ha curado? Si así es, que se vaya en paz a su casa a contar a sus nietos historias de su bondadosa senectud; pero que no lo ponga AMLO entre los hombres “rectos” que lo ayudarán a levantar este país.