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Dirigentes magisteriales de todo el país cobijan a Juan Díaz de la Torre, el líder de corazón cobarde

Juan Díaz de la Torre y Luis Castro Obregón FOTO: WEB

El hombre, desde los albores de la historia, cada vez que se sentía amenazado buscaba refugio en la tribu. Dentro de los suyos, agarraba valor y hasta simulaba que era poderoso, aunque en su interior, tuviera el corazón cobarde. Juan Díaz de la Torre, el hombre que se tendió como tapete ante Osorio Chong para que no le fincaran responsabilidades, y que no dudó ni un segundo para traicionar a su mentora y así el Gobierno Federal pudiera sustentar las acusaciones contra la otrora poderosa maestra Gordillo, este lunes buscó refugio entre los suyos.

La reunión cuasi secreta que convocó para hoy lunes, no es otra cosa que una intentona para definir posturas. Llama mucho la atención que, al término de la reunión, el güerusco líder respirara profundo y alcanzara a decir que el SNTE es más grande que cualquiera de sus integrantes y «nunca más nadie debe darle un uso patrimonial». Desde luego que esa frase, tiene dedicatoria.

Cómo ve usted a este exquisito personaje, lo cierto es que los cercanos a Díaz de la Torre y a Luis Castro Obregón, presidente del cacharro llamado Nueva Alianza, estaban al borde de la paranoia cuando se enteraron de los resultados de la elección pasada. Además, estos líderes quisieron cambiar su discurso de confrontación y señalaron que lucharán por abolir la Ley de Servicio Profesional Docente. Habrase visto semejante cinismo, cuando hace dos semanas, opinaban lo contrario. Ni hablar mujer traes puñal, dijera el Torito.