Invita el Instituto Nacional Electoral a que las empresas que se ocuparon de lanzar llamadas a nivel nacional en contra de López Obrador a que dejen de hacer, pues en todo caso serán amonestadas o se les podría imponer una multa de cinco mil UMAS, lo que equivaldría a 400 mil pesos. Por cierto, esto ocurre a unos cuantos días de la elección, cuando la queja la lanzó el partido Morena desde abril.
Al INE le tomó más de dos meses tomar esta decisión, y para verse justiciero, después de que las empresas delinquieron durante casi tres meses, a unos días de que terminen las campañas exhortan a que esas empresas dejen de delinquir o en todo caso les darán un jalón de orejas. Este tipo de cosas son muy del INE, quien no actúa de inmediato.
De hecho, nunca ha sancionado las “guerras sucias” que salen de los empresarios, y cuando actúa lo hace ya a toro pasado. Por ejemplo, en el caso de los monederos de Soriana, ya siendo presidente Peña Nieto, le llegó una multa al PRI por ese delito electoral, pero nunca revirtió el triunfo de Peña Nieto.
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