¡Qué poca vergüenza la de Héctor Yunes! Ya le íbamos a dar las gracias de que estuviera callado, sin soltar tonterías que perjudicaran al candidato Pepe Yunes, quien por cierto va en ascenso, cuando de repente utilizó la muerte de Ramos Gurrión para soltar su diarrea verbal. Como era de esperarse, con los micrófonos enfrente se fue sobre Yunes Linares, a lo que tiene derecho, pero en su embestida el excandidato a la gubernatura se puso a defender a Luis Ángel Bravo y a Karime Macías de Duarte. Para el senador Héctor Yunes la detención de Luis Ángel Bravo y la orden de aprehensión de Karime Macías es totalmente electorero. Como si los dos imputados no tuvieran pecados por los cuales se les debiera perseguir. Defender a Luis Ángel Bravo ofende a las personas que el exfiscal de Javier Duarte agravió; defender a Karime Macías de Duarte ofende a los millones de veracruzanos que fueron agraviados por la pareja sentimental de Javier Duarte, al que Héctor Yunes llamaba abiertamente su “jefe político”. Por cierto, ¿habrá ido Héctor Yunes al funeral de su amigo José Luis Santiago? ¿Tuvo cara para presentarse ahí?
Héctor Yunes rompe el silencio para defender al exfiscal y a la esposa de Javier Duarte, quien fuera su “jefe político”
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