Si Arturo “N” logra negociar una reducción de su condena, tenga la seguridad que es capaz de vender hasta su propia suegra con tal de salir lo mejor librado de las acusaciones que pesan sobre él. El chiste es salpicar lodo por doquier con tal que se quite un poco de su persona.
Según declaraciones del exhombre fuerte del sistema anterior, Javier “N” sabía perfectamente del ocultamiento de víctimas acaecidas por propias fuerzas policiales, pues él mismo había ordenado a Luis Ángel “N” (aquí entre nos Fisculín) que sólo informara de la aparición de seis cadáveres.
Con la detención del Fisculín, tenga por seguro que el propio exfiscal también tratará de jalar agua para su molino y administrar la información a su propia conveniencia. Así que, cierren las puertas señores, la pelea va a comenzar, ¡hagan sus apuestas!