Mientras José Antonio Meade Kuribreña se abalanza contra Ricardo Anaya y el desplumado chico Maravilla revira y contesta los golpes mediáticos, el oriundo de Macuspana, Tabasco se les adelanta en las preferencias electorales. El dicho que reza «come paisano, mientras yo te gano» refleja que, mientras otros pierden su tiempo en asuntos menores, el puntero sigue caminando sin parar para alcanzar su meta.
El error de Aurelio Nuño Mayer es haber metido como eje de rector de la campaña del priista que no lo es, la Reforma Educativa. Nuño guarda en lo más recóndito de su corazón la idea de que él pudo ser mejor candidato y eso, tenga por seguro, le está doliendo. Dicen que las segundas partes no son buenas y querer reditar la campaña del miedo contra AMLO no les ha funcionado.
Es cierto que en política nada está escrito y mucho menos en nuestro país. La ventaja que varios medios importantes adjudican al tabasqueño pone muy nerviosos a los mandones del PRI-Gobierno y tenga la seguridad que éstos ya tienen el plan B y C para no permitir que «un extraño enemigo» profane el bendito suelo de la jauja tricolor.
Por lo pronto, el domingo 22 la artillería pesada de acusaciones, descalificaciones y una que otra verdad a medias, tendrán como objetivo arrebatarle unos seis puntos al tabasqueño. Ya veremos si él se los permite, con eso de que, en los debates, AMLO es una chucha cuerera.
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