Después del reportaje de Carmen Aristegui, en el que se revela que hasta empresas fantasma utilizó la SEDENA para desviar recursos en la construcción de la barra perimetral, ya no se escucha tan insensata la propuesta de López Obrador de suspender la obra del NAICM. El presupuesto, como ya hemos reportado en LBP, casi se duplicó y la ASF está señalando irregularidades al menos por 300 millones de pesos.
Isabel Arvide señala que existen irregularidades varias “hasta gastos de ‘comunicación social’ que no correspondían se encontraron. Y facturas por ‘servicios’ que nunca se hicieron. Dobles indemnizaciones a empleados vueltos a contratar…”.