El daño que todos ellos causaron es histórico; Veracruz es el estado con más fosas clandestinas, con más cuerpos descubiertos, con más desaparecidos y ejecutados. Para los periodistas era tan evidente lo que estaba sucediendo. Muchos lo veían y lo denunciaban, por lo mismo tuvieron que pagar las consecuencias. Arturo Bermúdez Zurita, de una dependencia que debería dar seguridad, hizo una cueva de lobos hambrientos, enloquecidos que ante cualquier excusa levantaban a una persona y la desaparecían. Eso es “daño inmoral”, daño criminal.
Por causa de esos delincuentes, disfrazados de servidores públicos, hoy día nos da miedo cuando una patrulla nos pide que nos detengamos; nos da miedo cuando un policía se nos queda viendo; nos da miedo cuando un ladrón nos asalta y tenemos que llamar a la policía, porque no sabemos si la policía va a ser más delincuente que el ladrón. Eso es “daño inmoral”.