Los invito a que investiguen más allá de la opinión de la autonombrada líder de los vecinos, pues la reja de la calle Marmolina permanece 24 h. abierta ya que la de la calle Pedreta (justo enfrente del colegio) permanece cerrada desde el 7 de enero; pregunto entonces ¿es objetivo el siguiente texto?: “Tanto el gobierno municipal -que encabeza el alcalde Hipólito Rodríguez Herrero- como el estatal, obedecieron un “capricho” del subdirector del Colegio Galileo Ánimas, Antonio Vaca Breña, quien solicitó mediante oficio que se retiraran los portones, bajo el argumento de que «representaban un riesgo para los estudiantes».”
¿es un capricho pedir que quiten la reja que le impide el paso de vehículos a la escuela, o por lo menos que se abra para este fin? No vivo en esa calle, así que no me compete opinar si encerrarse resolverá el problema de la inseguridad, lo que sí creo es que la decisión de la autoridad debe ser congruente: si el portón se autoriza, entonces se garantiza su permanencia y se establecen reglas para que quienes viven o laboran ahí (como la escuela) tengan llave para el libre acceso a la calle; si se clausura el portón de inmediato se retira y no se hacen las cosas a medias para que los vecinos se burlen de la ley volviéndolo a poner».
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