Es cierto que un juez federal suspendió, de manera provisional, la designación de Juan Díaz de la Torre como presidente del Consejo General Sindical para el Fortalecimiento de la Educación Pública del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), esto conforme a los estatutos votados el 12 de marzo del 2013 y que lesionaron los derechos de los quejosos Emilia Castillo Luque, Catalina Heredia Cardiel y Rafael Olivera Ávila, pero de eso a que lo quiten de la presidencia está muy verde.
En este medio hemos señalado hasta el cansancio que, en política no existen casualidades, esto sólo es un calambre para los dos grupos antagónicos que llegaran con las espadas desenvainadas al Congreso Nacional del SNTE que se celebrara la próxima semana.
Lo que sí podría pasar es que el Congreso Nacional, a celebrarse en Puerto Vallarta, sea retrasado o se busque respuesta jurídica por parte de los abogados de Juan Díaz de la Torre. Pero eso, a que la maestra Gordillo regrese por sus fueros, sólo podría pasar hasta después del primero de julio y eso, si gana «ya sabes quién».