La defensa señalaba que el conductor no iba alcoholizado, sin embargo, los doctores determinaron que Villuendas iba completamente ebrio. Sobre este caso el tribunal que lo enjuicia lo halló culpable de homicidio doloso en contra de cuatro personas, por lo que es posible que se le dicte como sentencia la pena máxima que es de 20 años de prisión.
Al momento de escuchar que se le hallaba culpable, el imputado, dijo que «preferiría estar mil veces muerto», y que se arrepentía de haber causado la muerte de sus “amigos”, a los que como dijimos, acababa de conocer esa noche.