Si usted piensa que la democracia en México ya maduró y que hay apertura para que cualquier hijo de vecino pueda participar por un puesto de elección popular, déjeme decirle que está usted viviendo en el error. Según el Instituto Nacional Electoral (INE), cualquiera puede serlo siempre y cuando cumpla con una serie de requisitos. Un candidato cívico o candidato independiente es el postulante, usualmente a algún cargo político, que no pertenece a un partido político ya existente en el lugar. Uno de los requisitos fundamentales para ser candidato independiente es juntar determinada cantidad de votos que por ley exige el INE.
Pues resulta que algunos candidatos están haciendo trampa para juntar las firmas de apoyo. Se ha detectado que algunos aspirantes mandaron fotos de su tarjeta de soriana o de banco azteca o credenciales de elector hechizas. Por tan razón, el INE inició una investigación al respecto la semana pasada y en conferencia de prensa, el consejero electoral Benito Nacif, detalló algunas de las trampas ya mencionadas.
Se recordará que el INE les dio 60 días a los candidatos para juntar dichas firmas, tiempo que a muchos se les hace muy poco. Lo cierto es que muy pocos lo logran, sólo aquellos, como el joven Kumamoto, que cuentan con la simpatía ciudadana pueden lograrlo.
Comentarios