La incorporación de González Anaya a la Secretaría de Hacienda, nos manda un mensaje muy claro: Peña Nieto buscará hasta el último día de su mandato que los hombres entrantes le cuiden las espaldas. Gonzales Anaya como director de Pemex se caracterizó por cuidar que no se tocara a Emilio Lozoya por el caso Odebrecht, es un funcionario de todas las confianzas del presidente que cuidará la información de la Secretaría de Hacienda, siempre a favor de los amigos del Ejecutivo federal.
Y es que después de que Meade diera a conocer su deseo de participar en la contienda por la candidatura presidencial del PRI, el culto a la personalidad, como se hacía con los viejos tlatoanis, se comienza a manifestar. El anuncio de Meade sobre buscar la candidatura tricolor viene a confirmar las señales que se habían manifestado a favor de este funcionario; el poder de Peña Nieto bajará mientras el poder de Meade se irá acrecentando. Ya veremos más adelante que pasa.