Seguramente los xalapeños se preguntarán que si las manifestaciones en diversas avenidas no son chantaje y de alguna forma es una manera de presionar lícitamente, porque los 400 Pueblos ya no se encueran en las principales avenidas xalapeñas.
Y es que, es lógico que el líder de los pueblos desnudos niegue que haya recibido dinero de las manos de Javier Duarte, ni modo que diga a voz de cuello que la camioneta Denaldi último modelo —con valor de casi un millón de pesos— que usaba para transportarse el viejo líder la compró con su sueldo, si no se sabe que este personaje haya trabajado en alguna dependencia, en los últimos 10 años.
Lo cierto es que en la capital del estado nos hemos librado un poco de las impertinentes manifestaciones de Antonio Luna, de Antorcha Campesina y desde luego del denigrante espectáculo de desnudez al que obligaba César del Ángel a familias completas. Y todo por un pedazo de tierra donde vivir, o por lo menos de 500 pesos para irla pasando.