Se sabe que los secuestradores estaban pidiendo un rescate y en eso iban las negociaciones. Ha trascendido que durante el fin de semana las negociaciones para su rescate seguían, sin embargo, mientras los secuestradores insistían en el pago del rescate, Édgar Daniel ya tenía cuatro días de muerto.
La vileza de este caso tiene indignados a los pobladores de toda la zona y exigen se haga justicia y se encuentre a los secuestradores que no sólo quitaron la vida a Édgar Daniel, sino que pisotearon vilmente las esperanzas de los familiares. Hoy Misantla levanta la voz y pide justicia, pide seguridad, pide paz.