Ni se irrite ni se ofusque ni se pelee ni les haga caso. Las encuestas, lo repetiremos hasta el cansancio, sólo muestran lo que el que paga quiere que muestren, porque el que paga, en este país y en cualquier otro, es el que manda. Por ejemplo, esa encuesta de El Economista, donde aparentemente Andrés Manuel López Obrador está por encima de cualquier candidato, pero donde Osorio Chong se muestra más robustecido que Aurelio Nuño y que José Antonio Meade, ¿quién cree usted que la pagó?
No fue AMLO, porque aunque va arriba en esa encuesta, la ventaja es mínima y por lo mismo irreal. Esa encuesta la pagó el chino Chong, quien quiere seguir en la pelea cuando ve que los tiempos para la definición ya están encima. Pero mañana Nuño sacará la suya y pasado mañana Meade sacará la suya y dentro de una semana otra vez El Universal le hará el favor a Margarita Zavala y la pondrá como la única salvación para el Frente Opositor a pesar de que en ese frente no la pueden ni ver.
En fin, que si fuéramos congruentes en este país ya habríamos prohibido las encuestas, porque sólo sirven para que los militantes o los partidarios de uno u otro candidato se enfrenten.
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