Un gobernante inexperto, llegado al poder por las conveniencias encubridoras de su antecesor, piensa que son sus méritos los que lo colocaron ahí. Gobernar un pueblo es una responsabilidad inmensa. Gobernar significa brindar las oportunidades necesarias para que los ciudadanos que viven en la pobreza puedan realizar sus proyectos, por más sencillos que sean, por más complicados que resulten.
Gobernar significa crear los mecanismos para que una sociedad transite en un justo equilibrio, sin quitar a los ricos la riqueza que tanto trabajo les ha costado, pero sin relegar a los pobres a una miseria que no merecen.