Lo que se ha sabido es que este funcionario reveló que había sido presionado por el mismo Emilio Lozoya para que lo declarará inocente de los cargos que se le imputan, como todo mundo lo sabe, por supuestos desvíos de la empresa brasileña Odebrecht, al partido del cual formaba parte en ese momento y sintiéndose apoyado por la cofradía de Los Pinos, le exigió una disculpa pública a Nieto.
Cómo ve usted, la impunidad en su máxima expresión, y el mensaje es muy claro: que nadie se atreva a abrir la boca en contra de los amigos del presidente, para muestra tenemos la salida de Santiago Nieto, que se convierte en un ejemplo de impunidad presidencial para sus amigos y socios.