Y decimos habrá que esperar porque después de su actuación en la primera diligencia contra Duarte, la PGR no dio muestras de querer ir con todo en contra del exgobernador. A lo mejor el testimonio del gobernador de Veracruz y las pruebas que él ofrece estorban las verdaderas intenciones del gobierno de la República, intenciones que no parecen ser las de encerrar a Duarte por muchos años. El testimonio de Yunes y los videos donde confiesan los cómplices serían como una lápida para el exgobernador.