Ahora que han salido los audios sobre los mil millones de pesos en cajas de huevo para la campaña presidencial del que ahora no gobierna, pues menos nos consuela que esté siendo investigada. Lo que debería de haber en contra de esa mujer es una orden de aprehensión, es una orden de extradición que la obligue a pagar sus delitos a México.
Pero que esté siendo investigada, eso y la “carabina de Ambrosio” son lo mismo. Hay muchas pruebas y testimonios que señalan que la señora fue artífice, junto con sus parientas, de buena parte del saqueo. ¿Qué ella no era funcionaria pública? Eso se puede salvar cuando se descubra que ella dio órdenes para desviar presupuestos a sus empresas fantasma.