¿Y qué espera usted que digan los de la defensa de Javier Duarte? Pues que ellos la tienen ganada, que las acusaciones en contra de su cliente no tienen sustento, que presentan “graves vicios legales”. Esos pinches abogados mercenarios van por el dinero, no por la justicia; esos pinches abogados mercenarios buscan una victoria, no que se cumpla la ley; esos pinches abogados mercenarios van a exprimir a Duarte muchos de los millones que el desvergonzado robó a los veracruzanos.
Esa es su ética, ese es el valor que le dan a la justicia. Esos pinches abogados mercenarios serían capaces de defender al asesino de su abuela, con tal de que éste les pague sus honorarios y un bono extra si lo declaran inocente. Así es el mundo de esos tipos, farisaicos que son como sepulcros blanqueados por fuera, pero por dentro están llenos de inmundicia.
Entonces no prestemos oídos a sus declaraciones irritantes, a sus albricias anticipadas, a sus sonidos huecos que lo único que pretenden es enervar a la opinión pública. Javier Duarte tiene que pasar muchos años en la cárcel, no sólo por lo que se robó, sino por la pretensión vigente de seguirse burlando de los veracruzanos.
Comentarios