Como lo señalamos en este portal, aun cuando Margarita Zavala quiera ser la candidata de su partido el PAN a huevo, las cosas no se le dan. Ella cree que como los desmemoriados quieren tomarse fotos con ella, pues entonces todo el país la quiere. Pero ya se está dando cuenta que no.
En San Luis Potosí la aspirante del PAN a la presidencia quiso depositar una ofrenda en la tumba del doctor Salvador Nava, uno de los más grandes defensores de la democracia en este país. Cuando llegaba Margarita Zavala a la tumba la gente se le fue encima y la corrió. «Asesina» le gritaban, «asesina» recordando que en el sexenio de su marido fue cuando se dio la tragedia de los niños de la guardería ABC, donde una de las parientas de Zavala fue de las implicadas.
Ella quiso calmar a la multitud tomando el micrófono e intentando discursar, pero los gritos de «Nava sí, Zavala no», la dejaron muda y ante la imposibilidad de montarse en el prestigio del doctor Salvador Nava, la repudiada candidata tuvo que retirarse con la cola entre las patas.
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