A pesar de llegar acompañado de Jorge Flores, subsecretario de Educación Básica, no lo dejaron inaugurar el evento al que asistía. Los maestros de El espinal lo corrieron y pues donde no te quieren, ni modo de quedarte. No es el primer caso. Ya en la Quinta de las Rosas habían puesto en un principio como administradora a una mujer brasileña que decía iba a poner orden donde «todo era desorden».
Nada más que los adultos mayores de la Quinta de las Rosas no le permitieron poner ese “orden” que más bien era desorden. La reportaron y la señora tuvo que emprender su viaje a tierras cariocas. Digo, quieren venir de Sudamérica y enseñarnos a echar tortillas; ¡pues no!