Lo que deben de considerar los maestros es que el artículo primero, párrafo tercero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, señala la obligación de todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos, de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad.
De manera que en esta escuela secundaria se toma muy en cuenta que primero están los derechos y la integridad de los alumnos, se puede ver que solo se busca que el alumno aprenda en un ambiente de armonía y cordialidad. Bien por estos padres de familia que no muestran apatía por los asuntos escolares, y bien por el director, subdirectores de ambos turnos y, desde luego, por el personal docente y académico que apoyan estas medidas.