La madrugada de este lunes murió a los 57 años de edad, víctima de un infarto, Mario Moreno Ivanova, hijo de uno de los comediantes más grandes de nuestro país, Mario Moreno Cantinflas. El anuncio lo dio a conocer a través de su cuenta de Facebook su publirrelacionista Emilio Morales. La vida de la familia Moreno se ha visto empañada por la tragedia desde la muerte del comediante. Primero, una disputa familiar por los derechos de las películas de Cantinflas llevó a conflicto familiares a la fecha perduran.
Años después, en 2013, una lamentable noticia vuelve a cimbrar a la familia del Mimo de México, el cuerpo de Mario Moreno Bernat fue encontrado en el cuarto de un hotel ubicado al norte de la Ciudad de México. Se determinó que fue el mismo Moreno Bernat quien se quitó la vida, pero su madre argumentó que fue un asesinato.
Años después trasciende que un nieto de Cantinflas vivía en la calle, como indigente en el pueblo de Tecamachalco. El chico de nombre Gabriel Moreno Bernat, hermano de Mario (quien se quitó la vida), ofreció una entrevista para los medios después de que su hermana Marisa fue golpeada por su esposo, con lesiones que la llevaron a un hospital. Gabriel Moreno Bernat estuvo en rehabilitación por abuso de drogas.
Pues como bien diría Pompín Iglesias, «qué bonita familia, qué bonita familia». Lo que es un hecho es que la historia familiar de Cantinflas, después de su muerte, ha estado en el ojo del huracán, y poco se ha honrado la figura de una leyenda de la época de oro del cine nacional.
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