El Gobierno Federal está haciendo hasta lo imposible por dar una imagen de efectividad y de buen manejo de los recursos. Resulta muy sospechoso que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) esté informando esta mañana que, para el presente mes, las tarifas eléctricas para el sector industrial de alto consumo se reducen entre 9.2 y 12.5 por ciento, comparadas con abril pasado; mientras que las tarifas domésticas de bajo consumo llevan 29 meses consecutivos sin alzas.
Según los ingenieros y contadores de esta comisión, que por cierto nunca dan paso sin huarache, la baja se ubica entre 4.8 y 8.2 por ciento, mientras que el precio de uso doméstico de alto consumo, denominado tarifa DAC, registra un decremento de 4.8 por ciento.
Y es que, no es que estemos inclinados al sospechosismo, pero resulta muy dudoso que a un mes antes de las elecciones en el Estado de México (Edomex), donde por cierto el Primazo del presidente Peña se ha quedado estancado en las encuestas, ahora se quiera mostrar a un mandatario como un verdadero benefactor de las clases desprotegidas. Por favor, resultan tan obvios que hasta ternura dan.
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