No es nuevo comentar que las redes sociales son un riesgo real para algunos jóvenes que se dejan manipular con facilidad. Uno pudiera creer que es imposible que alguien, desde muy lejos, pueda ordenar a un joven que realice tareas drásticas y nocivas como levantarse en la madrugada y ponerse a ver películas de terror, invocar espíritus, cortarse el labio o marcarse con un cuchillo una ballena en el brazo.
Estos son algunos de los 50 retos que deben llevar a cabo aquellos que participaban en el juego “La ballena azul”. El paso número 50 era que el adolescente se arrojara de un edificio alto. Este juego que iniciara en Rusia, donde se dice que decenas de jóvenes se suicidaron, es creación un estudiante de 21 años llamado Philipp Budeikin, quien por cierto señala que con este juego brindaba a los jóvenes «calidez, comprensión y comunicación».
Philipp Budeikin ya fue detenido por la policía rusa. En algunas de sus declaraciones dice de los jóvenes que se suicidaron por seguir su juego: «Ellos (los del segundo grupo) son los que no tienen ningún valor para la sociedad y sólo le harán daño a ella. Estaba limpiando la sociedad de tales personas». ¡Cuidado con lo que sus hijos ven en redes sociales!
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