Señala Sandro Gómez de la Red de Jóvenes por México, un apéndice del PRI, que los dirigentes de su partido no los tomaron en cuenta por pobres, porque no tienen dinero para financiar sus campañas. Es por eso que acudieron a la Sala Regional del Tribunal del Poder Judicial de la Federación a interponer una demanda en contra de la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), al considerar que fueron violados sus derechos político-partidistas, ya que no fueron consideradas sus propuestas para candidatos a las alcaldías, sindicaturas y regidurías que estarán en juego el próximo 4 de junio.
Habría que decirle a este engendro duartista que no es que no los quieran por pobres, sino por engendros. Estos jóvenes siempre han vivido del erario público. Algunos de ellos vienen de la organización que comandaba el hermano del entonces gobernador, Cecil Duarte, Juventud Dinámica. Pero ahora que se quedaron sin ubre pretenden sobrevivir en alguna regiduría, sindicatura o alcaldía.
No entiende Sandro Gómez, ni la recua que lo sigue, que su pobreza no es de dinero, sino mental. Son tan pobres de mente que a pesar de que los desprecia el PRI, quieren seguir ahí.
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