Mussio Cárdenas Arellano /
* Planta a familiares de desaparecidos * Reclamos en reunión con Campa * El fiscal en un hilo * Farsa, despido del mapache de Marcelo * Sayune y el fraude * Zoyla Balderas, títere * Olmeca TV: sin pagar salarios * Reportera cobraba publicidad de televisora * Despedidos del ayuntamiento en “Yo con México”
Lo mismo le da al fiscal Winckler la mordaza informativa, la respuesta evasiva, sus calcetines en las redes, los muertos y los desmembrados. Lo mismo le da si al dolor de los familiares de los desaparecidos, la angustia de no saber, la presunción de una tragedia, suma el desdén y el agravio.
Otra tarde fatal la de Jorge Winckler Ortiz, el fiscal del yunismo, que libera la ira de los que buscan la verdad, que los planta y los irrita, que abre otro frente de guerra al gobierno que presumía de no ser como la pandilla de Javier Duarte. Y sí lo es.
Programó el fiscal general de Veracruz un cónclave con el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación federal, Roberto Campa Cifrián, y en ella los colectivos dedicados a la búsqueda de sus familiares plantearían sus quejas, sus demandas, su exigencia de ser atendidos y apoyados para esclarecer el destino de los suyos.
Llegaron a las 12 horas, este jueves 16. Aguardaron a las puertas de la Fiscalía, de pie, sin advertir que la esperanza se habría de transformar en reclamo. Transcurrieron los minutos, a prueba la paciencia. Al cabo de hora y media inició el conflicto.
Dan cuenta las crónicas periodísticas del evento más álgido enfrentado por Jorge Winckler, peor que el choque con casi un centenar de periodistas que exigen información de los eventos violentos, o el encarcelamiento con Arturo Bermúdez Zurita, el capo de la inseguridad en el duartismo, del que el fiscal ha salido airoso, pese a los augurios de otro fracaso.
Peor, también, de los obuses que le lanza la diputada panista Maryjose Gamboa Torales desde el Congreso, a quien Winckler libró de la cárcel, que tienen su origen en la negociación que el yunismo trabó con el ex fiscal Luis Ángel Bravo Contreras, alias “Culín”, el brazo ejecutor de Javier Duarte para encubrir trastupijes y mancillar la justicia.
Winckler desató la ira de los colectivos por una imprudencia. Fue descortés. Fue insensible. Fue soberbio.
Cuenta el portal Plumas Libres:
“Las bancas de la sala de espera fueron insuficientes para los más de 40 padres y madres quienes estuvieron de pie y nunca les fue informado que por cuestiones climáticas el vuelo del funcionario había aterrizado en Veracruz, y su traslado era por tierra, por lo que había un retraso.
“Ante ello, los padres, optaron por entrar por la fuerza a la sala de espera. ‘Es un trato revictimizante, y vamos a entrar, que tratamiento tan más infame, de verdad que no tiene vergüenza’, señalaron las familias, pasando a la fuerza por el arco de seguridad. Una vez en la sala les fue informado el retraso”.
Winckler y el subsecretario Campa arribarían más de dos horas después. Campa se disculpó. Winckler igual. Explicaba que por las condiciones climatológicas el trayecto aéreo se alteró. De ahí el retraso.
Y vino el reclamo:
“La disculpa aplica a usted porque viene de México, pero al fiscal no sé cómo tomar su ausencia y la desatención de dejar a alguien que se encargara de recibirnos. Ha sido un atropello, una humillación. El fiscal todavía no se ha metido en su cabeza que las víctimas tenemos derechos y sentimientos. Nos tiene que tratar con respeto y dignidad, no atropellarnos a la menor ocasión”, le dijo la representante del Colectivo Solecito, Lucía de los Ángeles Lagunes de Henao.
Explicaba Winckler su ausencia. Había acudido a buscar a Campa Cifrián al aeropuerto y el clima lo complicó todo. Le fue peor.
“Usted no es chofer —le espetaron—, no es recibidor de nadie. Por qué no dejó una comitiva. Le hace quedar muy mal como persona y en su educación”.
Winckler expresó: “Perfecto me disculpo, hay situaciones que no están en mi control, no volverá a pasar, igual”.
Lucy de Henao, sumamente alterada, reclamaba con vehemencia: “Que no está en su control, dejar una comitiva para que nos subiera”.
Y Winckler erró.
“Le pido respeto por favor”, dijo el fiscal.
Subió el tono de los colectivos. Enfatizaron que tuvieron que entrar por la fuerza a la Fiscalía. Winckler volvió a errar:
“Entraron a la fuerza a la fiscalía, hay otras personas esperando afuera aparte de ustedes”.
Y luego insistió:
“Nadie puede entrar a la fuerza en la Fiscalía”.
La respuesta fue contundente:
“Entramos a la fuerza por necesidad porque no podíamos quedarnos allá abajo paradas, humilladas”.
Se ve en los videos a un Campa Cifrián confundido, azorado. Intenta disculparse. Ofrecía datos, información que no se había revelado antes. Inútil, nada amainaba el vendaval.
A punto estuvo de reventar la reunión cuando los integrantes de los colectivos le dieron la espalda al fiscal del yunismo. Al percibir la tirantez, Campa caminó entre los presentes saludando a cada uno de mano, besando a alguna de las damas.
Tras el sofocón, procedió la reunión privada, sin medios de comunicación.
Cada caso es un dolor. Y son cientos ahí, integrados en 12 colectivos, entre ellos Solecito, Familias Enlaces Xalapa, Hasta Encontrarlos y Red de Madres Veracruz. Hablan de 23 mil desaparecidos contra los 5 mil que reconoció oficialmente “Culín”, el ex fiscal Luis Ángel Bravo Contreras.
Relatan que en Colinas de Santa Fe, en las cercanías el puerto de Veracruz, hallaron 218 restos humanos, pero la Fiscalía sólo menciona que son 164.
Son las madres del colectivo Solecito quienes han financiado la búsqueda en las fosas clandestina porque la Fiscalía, como con Bravo Contreras, no aporta recursos. De los más de 200 cráneos hallados menos de 10 han sido identificados y entregados.
Cuatro casos resaltan. Fueron hallados, reconocidos, pero sus familiares continúan esperando que se los den. Uno, el de un joven desaparecido en Rinconada el 30 de abril de 2014, ejecutado ocho meses después. No han cruzado datos de ADN y no lo entregan.
Otro es el de un joven de Minatitlán. Hallaron su ropa: playera, bóxer, chanclas. A los familiares les dijeron que lo habían llevado a Xalapa. Luego se enteraron que nunca salió de Minatitlán y ahí sigue pero no lo entregan.
Julissa Sánchez fue secuestrada el 19 de marzo de 2015. La hallaron hace seis meses, en Córdoba. Su ADN no es exacto. Ahí permanece.
Griselda Barradas acusa que en la Fiscalía nadie le ha informado oficialmente que los restos de su hijo, el agente del Ministerio Público, Pedro Huesca Barradas, aparecieron entre las osamentas de Colinas de Santa Fe. Tampoco le entregan el cuerpo.
Comparan a los fiscales: “Culín” Bravo era corrupto pero Winckler ni siquiera les da la cara. “No tiene la capacidad, parece que se acobarda, no hay investigación y nos dice que no hay dinero para pruebas de ADN, para eso o lo otro”.
¿Faltaba algo? Sí, una infiltrada.
Ahí, entre los que experimentan dolor por la ausencia de los suyos se ve a Pía Irene Salazar Santana, integrante del equipo de abogados del falso general Arturo Bermúdez Zurita, acusado él de desapariciones, de omisión, de complicidad con policías que levantan inocentes y no tan inocentes, que entregan a sus víctimas al crimen organizado.
Sentada en el extremo contrario a donde se hallaban Winckler y Campa, la abogada hablaba como si fuera víctima.
“Las señoras entraron a la fuerza, subieron a la fuerza. Nadie los recibió”, decía Salazar Santana.
Refiere la periodista Claudia Guerrero, que Pía Irene Salazar Santana distribuía papeles en que anotaba frases con que los familiares de los desaparecidos increpaban al fiscal: “Ineptos, malos modales, incompetentes, respeten nuestra calidad de víctimas, de qué corral salieron, pues parecen animales por insensibles”.
Se percató Winckler y reclamó su presencia y la instó a abandonar el salón.
Terrible día para Winckler que por una imprudencia, una descortesía, la soberbia de quienes detentan el poder, hizo sentir a los colectivos que con el duartismo estaban mejor. Y la enviada de Bermúdez Zurita ahí para calentarle la reunión.
Al dolor, Winckler agregó el agravio.
Archivo muerto
Descubiertos, fingen los mapaches que dejan el OPLE Coatzacoalcos. Pasa Armando Contreras Domínguez de la presidencia del órgano electoral a ser “suplente” en la Vocalía de Capacitación. O sea, ahí queda, en las sombras, operando como siempre lo hace, ahí donde se preparará a los ciudadanos que tendrán a su cargo las mesas de votación en la elección del 4 de junio. Lo “releva” Isela Ramírez Gallegos, quien era consejera electoral suplente. Otro que es movilizado es Mauricio Méndez Conde, que de ser consejero suplente pasa a ser consejero propietario. Mucho maquillaje, mucho show, para que todo siga igual. Aquí, en INFORME ROJO, el martes 15 se reveló la red de mapaches del ex alcalde de Coatzacoalcos y ex delegado de Sedesol federal en Veracruz, Marcelo Montiel, sus ligas con Armando Contreras Domínguez desde los años 90, cuando iniciaba el cacicazgo del clan Carlos Brito-Edel Álvarez-Marcelo Montiel-Sergio Vera Olvera, que se ha mantenido en el poder por más de 20 años. Armando Contreras era el coordinador del módulo de afiliación del Registro Federal de Electores en el municipio de Moloacán. Era el que le llevaba credenciales de elector naranja (antes de la fotocredencial) a Edel Álvarez, hoy magistrado presidente del Poder Judicial de Veracruz, para perpetrar el fraude electoral con el que llegó a la presidencia municipal. Maquillaje puro el cambio de Armando Contreras Domínguez, que ahí sigue, él y Julio César Ficachi Melgar como suplentes operando cómo ensuciar la próxima elección para elegir alcaldes. Se limpiará el OPLE sean relevadas Brunella Lagunes Santopietro o Guadalupe Pérez Sobrevilla, con imputaciones y evidencia de sus ligas con priistas. O el mismo Mauricio Méndez Conde, allegado al delegado de la Secretaría de Gobierno yunista en el sur, Roberto García Alonso, desde que ambos eran priistas… Sayune, la política, gira y gira arrastrada por el vendaval. Sayune, la periodista, ni en cuenta. Enfrenta Liliana Corona Sayune un escándalo que se liga con su pretensión de ser regidora en Nanchital, apoyada y apuntalada por el alcalde de Ixhuatlán del Sureste, José Santos Bartolo, acaudalado perredista con obras que realizan constructores afines y que año con año, por su mala calidad, deben ser reparadas. Va Sayune —la reina del sur, como gusta que la llamen— por la alianza PAN-PRD en Nanchital, en la planilla de Zoyla Balderas de Piña, que de pronto pasó a segundo plano porque la joven reportera simplemente le robó los reflectores. Liliana Corona Sayune recibe metralla, que si porque tiene una denuncia por fraude, derivada de un préstamo que primero negó y que al ser difundido el caso en el periódico El Heraldo, no tuvo más que apechugar. Sayune intenta refutar a su acusador, Gerardo Fernández González, representante de la Caja de Ahorros y Préstamos AC de los jubilados democráticos adheridos a la Sección 11 del sindicato petrolero arguyendo que no tienen facultad para facilitar dinero, menos a ella que no es jubilada. Le responde Gerardo Fernández advirtiendo que todo está en regla. Sus afines sostienen que Sayune es víctima de una guerra mediática. Sus acusadores sostienen que no hay tal: el préstamo por 30 mil pesos se le facilitó en 2013. No pagó y con los intereses alcanza la cifra e 43 mil 752 pesos a pagar. Y que la denuncia por fraude se presentó en 2016, meses antes de que se postulara para ser regidora por el PN-PRD. Sainetazo el de la reina del sur, que arrastra a Rogelio Franco Castán, pues el padrino de Liliana Corona Sayune, el alcalde de Ixhuatlán del Sureste, José Santos Bartolo, presume que le tuerce la mano al secretario de Gobierno de Veracruz “por lo que él ya sabe”. Jodidos los nanchitecos que con todo y su autonomía municipal vuelven a estar bajo los zapatos de los ixhuatlanecos, peor que cuando Nanchital era congregación de Ixhuatlán y que hizo correr tanto odio y tanta sangre. ¿O será para allá va Santos Bartolo? ¿Ahora a gobernar a sus vecinos? Todo un caso que arrastra a Zoyla Balderas, cuyo padre, el extinto Francisco Javier Balderas Gutiérrez, fue el que logró la autonomía municipal. Todo un caso porque decenas de medios ya tomaron partido porque desde ahora se trabaron convenios de publicidad que Zoyla Balderas, le guste o no, sin poder porque no lo tendrá, tendrá que cumplir. Lo que ha desatado Sayune, la política. Sayune, la periodista, es cosa aparte… Olmeca TV sigue en picada. Persiste la amenaza de embargo, el juicio que el ex alcalde de Coatzacoalcos, Marcos Theurel Cotero, entabló contra quienes han venido administrando la empresa, en la mira Miguel Ángel Luna Modesto, operador del también ex presidente municipal, Marcelo Montiel Montiel, y Marco Antonio Anaya Huerta. Un día vence uno y al siguiente se la revierten. Y mientras, el SAT aprieta y con una palanca política logra Olmeca TV una salida. Trenzados en su disputa, ni Theurel ni Marcelo voltean la mirada hacia su personal. Llegó la quincena y no hubo pago, amén de otros adeudos que datan de fines del año 2016. Aduce Theurel que no hay recursos, que el fraude es fenomenal, pues directivos, conductores y reporteros filtraban publicidad como noticias; destacaban acciones de ayuntamientos y políticos sin que se reflejara en la contabilidad de la empresa. Olmecas TV difundía eventos y entrevistas pero el pago no ingresaba a sus cuentas bancarias. Una periodista, por ejemplo, es quien obtenía el pago, quien emitía la factura, quien recibía los depósitos en su cuenta personal. Luego compartía los miles de pesos que le entregaban los personajes públicos. Y todo lo tiene Theurel. Es fraude y los nombres de sus autores habrán de desatar un escándalo de antología… Nace “Yo con México”, en Coatzacoalcos, y la conforman trabajadores municipales despedidos. Es la plataforma de Margarita Zavala, esposa de Felipe Calderón Hinojosa, aspirante a ser candidata del PAN a la presidencia de México. Se crea “Yo con México” y los primeros en sumarse con empleados que laboraron en el ayuntamiento de Coatzacoalcos y que terminaron sin trabajo. Ellos se fueron mientras otros permanecen, uno con 35 parientes en la nómina, tragando alcohol, haciendo negocios al amparo del poder, seguro que para comprar más alcohol. Bien dicen que los despedidos de hoy serán el voto de castigo del 4 de junio…