¡Qué caro está pagando Televisa y sus secuaces el haber justificado la estulticia del candidato Peña Nieto! Usted debe recordar que mientras era candidato el hoy presidente de México, en la Feria del Libro de Guadalajara no pudo citar a tres autores que le hubieran marcado en su carrera política. Se equivocó en el nombre de los libros y de los autores y hasta consideró que la Biblia era una novela. En el programa Tercer Grado en el que participaban López-Dóriga, Denise Maerker, Adela Micha, Víctor Trujillo y Carlos Marín, entre otros, se pusieron a defender la estulticia de Peña Nieto.
Adela Micha, con su tartajante voz y su estupidez supina decía: «Leer es irrelevante a la hora de gobernar». Carlos Marín, Patiño del poder, dijo: «Parte de la crítica que se ha hecho a esta pifia, o dislate, es de personas que no tienen la menor idea del libro del que habló Peña Nieto, de los autores, que jamás leyeron a Rulfo, que forman parte de la ignorancia de bibliografía en México».
A casi seis años de esa pifia nos damos cuenta que sí era relevante haber leído libros para gobernar; para nosotros siempre fue obvio. Todos esos que defendieron a Peña están o estarán muy pronto fuera de los programas de televisión que en ese momento tenían. Esperemos que hayan vendido caro su “prestigio”, porque a estas alturas no creemos que lo puedan recuperar.
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