Sin embargo, dichos poderes interpusieron revisión, misma que no prosperó por sus argumentos, sino porque de oficio el Tribunal Colegiado advirtió que no fue llamado a juicio Roberto Dorantes, quien sustituyera en 2015 a Fernández Campos, y fue así que revocó el amparo concedido para que llamara a Dorantes al juicio.
Una vez concedida esa intervención, el Juez Segundo de Distrito volvió a conceder el amparo a Onésimo Fernández Campos, y seguramente los poderes Legislativo y Judicial volverán a recurrir en revisión, sin embargo se anticipa que no prosperará dicha revisión, en razón que el amparo concedido es acatamiento a jurisprudencia firme de la Suprema Corte. Aquí se ve la diferencia de tener un buen abogado; ya lo quisiera Fidel para un domingo aunque sea.