El que ha roto su voto de silencio y ha dejado oír su ronco pecho es Cuitláhuac García, el hijo del profe Atanasio. Después de varios meses sin escuchar las líneas que le dictaba Andrés Manuel López Obrador, el excandidato morenista deja oír sus gorgoritos en contra de Miguel Ángel Yunes Linares.
En el norte del estado, Cuitláhuac García expuso el trato que hizo Miguel Ángel Yunes Linares con Enrique Peña Nieto al darle la gubernatura del estado con tal de que no revelara los detalles de los desfalcos que se hicieron para su campaña en el 2012; «es una traición, una puñalada al pueblo, cuando Yunes era diputado siempre defendió a Osorio Chong y ahora sigue siendo un fiel sirviente».
Lo cierto es que el diputado morenista se ha visto lento, al principio visitó a sus electores, después no se ha escuchado su participación en los distritos morenistas. Lo que es un hecho, es que la guerra electoral ha dado principio en Veracruz, y por lo que se puede ver, esta guerra sólo será entre dos colosos, uno en alianza, PAN-PRD, y el otro en pleno crecimiento, Morena. Y por esta ocasión en PRI sólo será comparsa.
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