De acuerdo a versiones de los testigos, al parecer el chofer de esta pipa que trasportaba agua, iba jugando carreritas con otra unidad, por lo que se supone el conductor del camión perdió el control por el exceso de velocidad. Los responsables alegan que hubo fallas mecánicas, sin embargo, en el peritaje habrá de salir el amarre de las llantas que quedó marcado en el pavimento de la avenida antes de impactar contra los otros coches a los que le dio alcance y que desmentirá la versión del conductor.
Estaremos en espera de que las autoridades correspondientes presenten el informe y se castigue a los responsables de terrible accidente que cobró la vida de muchos inocentes y que sus familias hoy claman por la justicia correspondiente.