Como reza el eslogan de conocida tienda de papelería y muebles de oficina, «desde un clip hasta una computadora», los diferentes secretarios de despacho se han encontrado con oficinas sin papelería y sin computadoras. Resulta que los hijos de la fidelidad y el duartismo se llevaron hasta los botes de la basura, tanto fue su enojo por haber perdido que desde el 5 de junio comenzaron un silencioso robo hormiga.
Los extitulares de las diferentes dependencias llegaron con una mano por delante y otra por detrás, muchos llegaron sin automóvil y hoy se van con varias unidades de lujo, como por ejemplo el jefe de seguridad de Javier Duarte de Ochoa, el supuesto “teniente” David Martínez Cárdenas, con clave “Cosmos.”
Este sujeto, al igual que su patrón, demostró su hambre y gula por el dinero. No sólo hacia sus enjuagues con los uniformes y equipamientos, sino también alteraba facturas de viáticos. El robo de gasolina y combustible se daba de manera grosera, el pretexto que usaba era que al gobernador le gustaba moverse en 12 camionetas blindadas de marcas como Totoya Sequoia, Chevrolet Suburban o Yukon, y que éstas gastaban mucho gas. La verdad es que este sujeto era un ladrón de siete suelas. Ojalá y lo hagan devolver las propiedades que se agenció ilícitamente.
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