Un minuto de reflexión…

Javier Duarte de Ochoa y Juan Gabriel FOTO: GOOGLE
- en Opinión

Maryjose Gamboa / En las redes sociales la muerte del cantautor mexicano  conocido como Juan Gabriel, se convirtió en Trending Topic a nivel internacional, mientras que  en  los medios  nacionales la noticia fue retomada como una auténtica tragedia… En ambos foros de expresión se enumeraron sus logros y virtudes, sin embargo muy pocos se mostraron dispuestos a analizar el hecho que la sociedad que hoy le llora es la misma que no le aceptó nunca del todo, que ridiculizó sus gustos y preferencias, y que le negó como al resto de los miembros de la comunidad gay, sus más elementales derechos.

Podía componerle y cantarle al amor, pero no tenía derecho por ejemplo, de casarse con quien tal vez lo inspiraba… Más que por homenajes póstumos en los que se pida un minuto de silencio o de aplausos, habrían de optar por uno en el que se pida un minuto de reflexión sobre la doble moral que impera en una sociedad en la que las creencias personales parten en dos el estado de derecho.

¿Amor eterno?

No entre Duartistas. La conveniencia ni es amor, ni es eterna.  Publica la revista PROCESO en su edición de ayer en una nota pagada: “Diputados Veracruzanos a favor de la investigación del SAT”… Marco Antonio del Ángel Arroyo, diputado local del PRI (hijo del líder de los 400 pueblos que ni son 400 ni representan a ningún pueblo), y Eduardo Sánchez Macías, diputado local del partido Verde y empresario de medios de comunicación en el estado, piden que la investigación que realiza el Sistema de Administración Tributaria en contra de Javier Duarte de Ochoa, así como de cinco integrantes más de su gabinete, llegue hasta sus últimas consecuencias.

Eduardo Sánchez Macías (responsable de la inserción pagada en la revista de circulación nacional, según se aclara en la misma nota) hace referencia a aquellos funcionarios que “entran con un vehículo modesto, y salen con flotillas de autos importados”.  Y aunque  en la nota se  asegura que este no menciona ni los nombres de estos funcionarios ni de los cinco investigados juntos con Javier Duarte, probablemente “off the record” lo haya hecho, porque acto seguido se puede leer: “Se estima que pudieran ser los diputados federales Alberto Silva, Edgar Spinoso, Tarek Abdalá, y los legisladores electos Juan Manuel del Castillo y Vicente Benítez”.

Por su parte el priista Marco Antonio del Ángel declara: “El que la deba, que la pague. Como siempre hemos dicho en el Congreso, se tiene que actuar parejo  y quien cometa un ilícito tendrá que responder ante las autoridades correspondientes”… No bueno,  el chiste se cuenta solo.

Vaya cinismo de este tipo que hasta el jueves pasado le aprobó a Duarte junto con el resto (“los que SIEMPRE han dicho en el Congreso que se tiene que actuar parejo”) TODO lo que este quiso por más ilegal, inmoral, o injusto que fuera.  Ahora respecto a la otra parte de la frase, es de verdad como para enmarcarla y ponerla en la entrada del Congreso; “QUIEN COMETA UN ILÍCITO TENDRÁ QUE RESPONDER ANTE LAS AUTORIDADES CORRESPONDIENTES”…

Aplauso de pie para el que apenas en la sesión del pasado jueves 18 de agosto en Perote como sede alterna, SE BURLÓ EN TRIBUNA del Fiscal General de Duarte y de la “justicia” veracruzana  al reconocer sin ningún recato, que los 13 sujetos que tienen una orden de aprehensión por las agresiones perpetradas en contra del Gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares al salir del Congreso local, SE ESCONDEN EN SU CASA DEL DF. Sabía perfectamente el diputado del PRI que ni por encubrir a estos tipos ni por exhibir a Luis Ángel Bravo como lo que es, un infeliz pelele al servicio de Duarte habría consecuencias, nadie iría ni por él, ni por los trece que “esconde”.

¿Pero qué tuvo que pasar para que Eduardo Sánchez  Macías y Marco Antonio del Ángel PAGARAN una fuerte suma de dinero por esta nota publicada en la revista PROCESO número 2078 el día de ayer? A ciencia cierta no lo sabemos, pero varios medios de comunicación propiedad de Sánchez Macías aparecen en la lista de “proveedores” a los que el Gobierno estatal adeuda millones, y a los que pretendía pagarles con lo recaudado con el impuesto del 3% a la nómina. Esta iniciativa fue desde luego votada a favor por Sánchez Macías cuando aún defendía a Duarte, pero a los pocos días cambió de opinión… Primero uno de sus medios publicó un reportaje dedicado a Erick Lagos “De mendigo a millonario”, y ahora a través de PROCESO retomó la denuncia en contra de Duartistas y Fidelistas que al amparo del poder amasaron incuantificables fortunas.

En el caso de Marco Antonio del Ángel, probablemente no haya cumplido Javier Duarte con lo prometido por emboscar al Gobernador electo  Miguel Ángel Yunes Linares, al Dirigente Nacional del PAN Ricardo Anaya, y al Senador Santiago Creel,  cuando salían del Congreso local… Literalmente centenares de sujetos de los “400 pueblos” (varios de ellos armados) los tundieron a palos y piedras hasta que pudieron llegar a sus vehículos, provocando que un integrante de su equipo tuviera que ser hospitalizado y varios más atendidos en urgencias.

Lo único cierto es que al menos de momento, a ambos diputados locales se les acabó “el amor” por Javier Duarte y quieren que todo el país se entere… Ya nada más falta esperar la reacción del “abandonado” porque seguro la habrá.   El despecho nunca ha sido buen consejero.

Este sí, y de los buenos

Pero bueno al menos con un amor eterno cuenta Javier Duarte, con uno que como su nombre lo dice va más allá de la vida, el de su amigo y presunto operador financiero Moisés Mansur Cysneiros. Después de darse a conocer que nombró como su heredero a Javier Duarte, Mansur respondió a través de un comunicado que efectivamente lo hizo, pero con el pecho tan sano y tan repleto de cariño, que ni siquiera le avisó a Javier Duarte… Por lo que usted me dirá si esta no puede ser acaso una historia que merezca ser recordada con el mayor éxito de Juan Gabriel de fondo.

No bueno… A Fidel Herrera “la lotería” le garantizó una fortuna, y a Javier Duarte las herencias en vida o después de la muerte. Ni hablar, que tipos más afortunados, aunque claro, solo falta descubrir de dónde lograron semejantes fortunas sus benefactores, porque ellos “ni le pegaron al gordo”, ni fueron bendecidos con tantos parientes y amigos “filántropos” ¿o sí?

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