Armando Ortiz / ¿Qué tiene Woodlands que muchos funcionarios duartistas y fidelistas tienen casa ahí? ¿Qué tiene Woodlands que muchos empresarios beneficiados durante la “docena trágica” compraron propiedades ahí?
Woodlands está ubicado en el condado de Montgomery en el estado de Texas, en los Estados Unidos, muy cerca de Houston. En el año de 2010 su población era de 93 mil 847 habitantes, para el año 2015 la población era de 109 mil 679 habitantes, muchos de ellos, lo podemos decir, provenientes del estado de Veracruz. De acuerdo con datos tomados de la Wikipedia los hispanos son la población de mayor crecimiento en esta zona. Es por ello que las escuelas de enseñanza media son bilingües. La zona que más llama la atención es Creekside Park, una zona residencial de lujo, muy exclusiva.
Recientemente el periódico El financiero publicó que la comunidad de Creekside Park le daba la bienvenida a la familia Duarte-Macías como nuevos residentes. Javier Duarte señaló que no es residente de esa zona, sino que tiene una membresía para un club de golf. Ya sabe usted, si utilizaba el helicóptero de gobierno del estado, el mismo que le regaló a su amigo el Fiscal Luis Ángel Bravo, para ir a Córdoba a comprar tortas a “La Rielera”, porque no iba a utilizar el mismo transporte para ir a jugar golf si de repente le venía en gana.
Pero el caso es que Duarte como acostumbra, trató de tapar el sol con un dedo, queriendo distraer con esa broma de mal gusto el descubrimiento de una de sus tantas propiedades en el extranjero.
Pero Javier Duarte no es el único que posee una propiedad en Woodlands. De acuerdo con reporte periodístico de Claudia Guerrero, realizado desde abril de 2015, son muchos los funcionarios y empresarios que tienen propiedades en este paraíso terrenal. Claudia enumera a Arturo Bermúdez Zurita, Pepe Mansur (señalado como prestanombres de Javier Duarte) y Adolfo Mota, además de un empresario que pasó de farmacéutico a restaurantero.
A esta lista habrá que agregar a Harry Grappa, el consentido de Javier Duarte, a quien se le permitió todo tipo de abusos en la Secretaría de Turismo. En entrevista radiofónica Harry “el sucio” Grappa ha señalado que sí tiene una propiedad en Woodlands, el complejo residencial de moda para los funcionarios veracruzanos. A manera de descargo Grappa asegura que esa propiedad está en su declaración patrimonial aludiendo que no es ningún delito tener propiedades en el extranjero.
Qué bueno que Harry esté consciente de lo que es delito y lo que no es, para que cuando le caiga la auditoria y entonces se den cuenta de a quién se asignaron muchos de los contratos de prestaciones de servicios, él sepa reconocer si infringió algún artículo de la Ley de Responsabilidades para Servidores Públicos. Por supuesto los encargados de auscultar los documentos de la Secretaría de Turismo deberán tener cuidado para no irse con la finta, pues algunas de las empresas que prestaron servicio en Turismo están a nombre de empleados y amigos del mismo Grappa. Pero la Ley de Responsabilidades para Servidores Públicos es muy específica al respecto, por lo que se deberá de aplicarse de manera rigurosa.
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