Hoy, con renovada actitud conciliadora, Aurelio Nuño dijo que espera que los maestros de la CNTE cambien de opinión sobre el modelo educativo, y que no se autoexcluyan del proceso. Casi de rodillas y con una vela en la mano pidió a la Coordinadora que no descalifiquen un documento que no todavía no conocen, pues no se vale ponerlo de pretexto para decir después que nadie los invitó.
A Nuño Mayer le encantan las entrevistas en el estudio de Ciro Gómez Leyva por la mañana; el rubicundo funcionario subrayó «ojalá (la CNTE) cambie de opinión, primero ojalá que no descalifiquen documentos que todavía no conocen; ojalá se den el tiempo de conocer los documentos y, después, ojalá que no se autoexcluyan de un proceso que va a implicar un análisis y una discusión con todo el país, con los grupos centrales de la educación. Ellos son uno, pero esta es una discusión que queremos tener con todos». Lo que no sabe, o no quiere reconocer el pequeño delfín, es que fue precisamente la CNTE quien lo excluyó de la maesa de negociación con la Segob.