Lo cierto es que nuevamente quiere llamar la atención de los medios para que la gente diga: «¡Hay pobrecito maestro, que malos son los de la Coordinadora!» Lo que no se ha divulgado es que este señor no es lo que aparenta: no está titulado, no cuenta con cédula profesional, ni domina metodología de enseñanza alguna. De los 30 años que tiene en el servicio, sólo estuvo frente a grupo 15. El resto del tiempo se desempeñó como auxiliar técnico, con frecuencia supervisando personal de intendencia.
Y es que el profesor Estrada fue corrido de varias escuelas en las que trabajó por sus constantes inasistencias. Su grave problema de alcoholismo le acarreó frecuentes conflictos con los padres de familia de varios centros escolares de la zona 07 de Ocotlán y de la 98 de la colonia Maestros. Incluso fue acusado de utilizar indebidamente el dinero de los libros de un taller de la zona 98. Ni modo, ojos vemos corazones no sabemos.