Se prenden los focos rojos en residencia oficial del presidente de la República, las consecuencias por haber llevado mal el conflicto con la CNTE ha generado una molestia contra el Gobierno Federal y una simpatía al movimiento disidente de los maestros. Estados donde había prevalecido la apatía de las marchas, hoy se suman al descontento generalizado.
En estados como, Nuevo León, Matamoros, Tamaulipas, Aguascalientes, Guanajuato, Coahuila, Aguascalientes, Guanajuato, Chiapas, Guerrero, Michoacán, Veracruz, Yucatán, Morelos, Jalisco, Chihuahua, Tlaxcala, Tabasco, Zacatecas, Sinaloa y el Estado de México, se han manifestado los padres de familia con los maestros. Las protestas contra la Reforma Educativa y en solidaridad con el magisterio oaxaqueño se han desbordado.
El peso político y responsabilidad recae en el secretario de Gobernación, Osorio Chong; este curtido político sabe que si entrega buenas cuentas, no sólo se ganara la aprobación del presidente, sino también los aplausos de la sociedad mexicana, que lo comenzará a ver con otros ojos.
Por el otro lado de la mesa hay un representativo legítimo de la CNTE, que hasta este momento se ha visto conciliador. El que de plano se ha ido disminuyendo es el secretario de Educación, Aurelio Nuño, que desde el principio de sus funciones como funcionario se había negado al diálogo.
Comentarios