Francisco de Luna / Xalapa, Ver. «Estoy feliz de la vida. Era el momento que esperábamos desde hace muchísimos años», fue parte del mensaje inicial del gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares, al dirigirse a los asistentes que habían abarrotado la plaza Sebastián Lerdo de Tejada en la ciudad de Xalapa.
Ahí se congregaron para escuchar el discurso del panista, quien agradeció el apoyo y el que hayan votado por el cambio.
«El voto de millones de veracruzanos hizo posible la alternancia en el Gobierno. Es el de todos nosotros un triunfo histórico», dijo mientras las familias aplaudieron, sacudieron las banderas azules y amarillas y alzaron las manos formando la “V” con los dedos en señal de victoria.
Recalcó que se trata de un triunfo histórico para Veracruz y México. «Quedan atrás 86 años de gobierno del mismo partido para dar paso a un gobierno plural surgido de la fuerza popular, de la voluntad democrática que logró imponerse a un régimen que no quería y que no quiere irse».
Antes de continuar con su mensaje, subió a sus nietos María, Ana, Santiago, Álvaro y Miguel a quienes presentó ante el público.
«Desde aquí, desde Xalapa, desde el corazón de nuestro querido estado le digo a todos los veracruzanos y veracruzanas, gracias, muchas gracias por darme la honrosa oportunidad de encabezar el cambio en Veracruz».
Entre los asistentes había quienes además de llevar la playera con los apellidos Yunes Linares o el logotipo del PRD, también cargaban con una cubeta, escobas y trapeador como símbolo para “limpiar” al estado veracruzano.
Régimen autoritario, represor y corrupto
Reiteró que el documento que le fue entregado por el OPLE, demuestra la inquietud de los veracruzanos que quieren un gobierno distinto.
«Millones que queremos un Veracruz de esperanza, un Veracruz más justo, de oportunidades, limpio, de instituciones y de leyes, el mandato popular es claro. Se trata de cambiar a quienes gobiernan para cambiar a fondo el modelo de gobierno, cuya esencia se encuentra en los partidos que me postularon el del PAN y el PRD».
También dijo que los veracruzanos decidieron con sus votos, expulsar del Palacio de Gobierno a un régimen autoritario, represor, corrupto y corruptor que pretendía mantenerse en el poder para que todo siguiera igual.
«Votamos para cambiar, votamos para rescatar a Veracruz, para cambiar el rumbo y así sacar a nuestro estado de la severa crisis que nos afecta. Para vivir seguros, para vivir sin miedo».
«Votamos por un gobierno que se ocupe de los más pobres, de millones que apenas tienen para alimentarse, millones que han sido abandonados a su suerte por gobiernos insensibles que con vileza desviaron los recursos para combatir el rezago social».
Asimismo dijo que el voto fue una exigencia de honestidad y plena transparencia en la aplicación de los recursos públicos, «votamos por quienes viven en el desempleo o con malos salarios, votamos por los hombres del campo para sacarlos del olvido y el abandono».
Yunes Linares, en el mensaje en la plaza central de la capital veracruzana, también hizo referencia que el voto de los ciudadanos fue para rescatar a la Universidad Veracruzana (UV), a los pensionados y jubilados y por todas las instituciones de educación superior que hoy se encuentran en crisis.
Cárcel
Analizó que fue el voto para el cambio político, donde el gobierno no desvié recursos para apoyar un partido, sino para tener un poder Legislativo autónomo que responda a los intereses del pueblo y no al gobernador.
De la misma manera se refirió a los periodistas de quienes dijo que también se votó por la libre expresión, así como la manifestación y difusión de las ideas.
«Desde esta plaza que lleva el nombre de un gran veracruzano y honra la memoria de Regina Martínez, una gran periodista veracruzana, me comprometo a respetar el derecho de los ciudadanos y especialmente de los periodistas a difundir sus ideas, comentar, criticar, manifestarse, sólo atenidos a la ley y a su conciencia».
Como gobernador electo, dijo que desde la Plaza Lerdo que ha sido escenario de los descontentos y miles de protestas contra el gobierno, lanzó el mensaje en contra del gobierno que —dijo— cerró las vías del diálogo y las puertas del Palacio.
«Me comprometo que gobernaré cerca del gran pueblo veracruzano. Me comprometo a que a partir del 1 de diciembre desaparecerán las vallas, habrá apertura y diálogo y este palacio estará abierto a todos los veracruzanos».
Mientras él desglosaba su discurso, los aplausos se escuchaban en el centro de la ciudad, además de las porras y gritos al unísono que pedían cárcel para los actuales funcionarios de Gobierno del Estado de Veracruz.
Pues dijo que la impunidad y complicidad han potenciado la inseguridad que preocupa a todos; mientras que la corrupción ha llevado a la crisis financiera, a la peor de la historia y ha generado la desigualdad y tragedia social que viven millones de Veracruz.
«Quienes han tenido en sus manos el gobierno y desviaron a sus bolsillos los recursos de los veracruzanos, tienen que pagar las consecuencias».
Enseguida se escuchó «¡Cárcel, cárcel», al tiempo que resonaban las matracas y señalaban hacia el Palacio de Gobierno.
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