Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. El gobierno de Javier Duarte niega la liberación de recursos económicos destinados a la compra de alimentos para los menores del Centro de Desarrollo Infantil (CENDI) número 1.
Desde las seis horas con 30 minutos, padres de familia y personal del CENDI tomaron las oficinas de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) y del mismo CENDI, para exigir a las autoridades estatales que otorguen el dinero correspondiente.
De acuerdo con el vicepresidente de la Sociedad de Padres de Familia, José Guillermo Sayago García, se deben más de 300 mil pesos, correspondientes a una partida federal que ya fue depositada en tiempo y forma.
«Sí han ido cubierto pequeñas cantidades de 30 mil pesos o 40 mil pesos, de manera mensual, pero esto no nos alcanza absolutamente para nada, a los proveedores ya los tenemos hartos, algunos nos apoyan y nos dan más tiempo, por consideración».
Los más de 300 menores, desde maternal hasta el tercer grado de preescolar, tenían que recibir su respectivo desayuno y comida.
«El jueves de la semana pasada hicimos lo posible para dar la alimentación para ellos, hoy (lunes) y mañana, vamos a estar así hasta que se vea reflejado el depósito y la directora nos diga que ya está el pago, vamos a levantar esta manifestación».
En cada año del actual gobierno se registró un atraso en los pagos. Tan sólo el año pasado, las autoridades debían casi medio millón de pesos por dicho concepto.
«Las pequeñas cantidades que nos iban depositando, eran administradas de acuerdo con todas las necesidades, principalmente en alimentos. Ahorita se le debe a todos los proveedores, por agua, luz, gas, leche, carnes, tortillas, abarrotes, todo».
En las oficinas de Sefiplan, la tesorera del CENDI, Andrea Lara, señaló que los apoyos económicos son retenidos, pese a que llegan “etiquetados” al gobierno estatal.
«Tenemos tres meses de retraso: marzo, abril y mayo, y hasta la fecha no ha habido pago».
Esta situación obliga a los padres de familia a cubrir esos rezagos existentes, pues llevan a sus hijos “desayunados” y los recogen a las 13 horas con 30 minutos, porque en el CENDI ya no pueden alimentarlos.