Pueblo Viejo, Ver. “La Universidad Popular Autónoma de Veracruz debe ir más allá del horizonte, fortalecer su presencia en el estado y seguir siendo la oportunidad educativa de aquellos que tienen el sueño y el deseo de servir a sus semejantes con los conocimientos que esa casa de estudios les otorga; ser agentes de cambio en cada sitio en que se desenvuelvan y mostrar con un ejercicio profesional responsable, que están capacitados para realizar acciones en favor del bien común”, indicó Nancy Isabel Cordero Rodríguez de 33 años de edad, egresada de la licenciatura en Educación Deportiva.
La nueva profesional destacó “La universidad debe ir más allá de lo que ya ha hecho porque considero que fue creada para ser un referente de una educación universitaria práctica a través del autodidactismo que propicia que los alumnos construyan su conocimiento y refuercen lo que los asesores solidarios les otorgan”, estableció.
Consideró que su compromiso con la sociedad de Veracruz es compartir sus conocimientos con los demás, enfrentar con acciones directas el problema de obesidad que predomina en la actualidad desde la infancia y si se ejecutan, dijo, estrategias concretas con el desarrollo del deporte en todas sus facetas y con una alimentación sana y acorde a las características de cada persona, esa situación debe cambiar.
Destacó que cuando se enteró de la existencia de la llamada universidad del pueblo y para el pueblo, se dio cuenta de la gran oportunidad que el estado les otorgó para alcanzar el sueño guardado por mucho tiempo, por lo que inició sus estudios universitarios en una carrera en la que ella era la única fémina que tomaba parte en la misma.
Comentó que contó siempre con el apoyo de su familia y en ese sentido su esposo ha sido un gran aliado al permitirle desde el primer momento estudiar, así como su madre que fue la que cuido de sus hijas durante el espacio de tiempo que duró la carrera.
Luchadora por naturaleza, Nancy Isabel no se arredró ante los momentos difíciles que le presentó la vida en su formación y una parte de ello fue en el momento en que se encontraba en pleno estado de gravidez cuando su esposo le pidió que considerara su estado y lo difícil que sería seguir estudiando; nada le importó y siguió su formación hasta el momento en que nacieron sus hijas.
Con ese espíritu de triunfo y deseo por participar en la mejoría del medio en que se desenvuelve expresó que esa universidad con su tarea educativa y los egresados con el ejercicio responsable de su profesión pueden cambiar el entorno social, inhibir conductas antisociales, “generar un cambio positivo para bien de los habitantes de la sociedad, que considero se inició desde el momento en que es casa de estudios pue puesta en marcha”.
“Invito a todas las personas, casadas, divorciadas, viudas, trabajadores, solteras, empleados municipales y estatales, agentes de tránsito, de la policía y a todos los que desean trascender a que aprovechen la oportunidad que les da esta universidad; he conocido a personas que son egresadas de UPAV y son muy reconocidas por su labor y por la formación que tuvieron en esa institución; nunca es tarde para transformar su existencia”, concluyó.