Ícono del sitio Libertad Bajo Palabra

Las transas del alcalde de Emiliano Zapata

Édgar Hernández* / 

¡Los moches de Daniel Olmos!

Cuando a finales de los ochenta llega por primera vez al poder el PRD en el viejo DF, todo México pensaba que llegaban a su fin los malos gobiernos, los corruptos y que la democracia tomaba carta de naturalización.

Pero ¡Oh, sorpresa! resultó que los izquierdistas de mal aliento, en realidad priistas resentidos, resultaron peores que los tricolores.

En Veracruz el PRD está totalmente desacreditado.

No representa nada, se vende al mejor postor y ya gobierno sus exponentes se dedican a saquear al erario público como es el caso del alcalde de Emiliano Zapata, Daniel Olmos García, quien al llegar a la presidencia municipal lo primero que hizo fue escriturarse el municipio y hacer y deshacer a su antojo.

A menos de dos años de gestión ya tiene demandas de Ferchegas, denuncias de empresas comerciales a quienes se les niega permiso de establecimiento a menos que se mochen y el descontento de la empresa Gas Natural del Sureste S.A de C. V., a la cual exigen cantidades millonarias por permitirles construir el ducto de gas natural para dar servicio a sus habitantes.

En otro sentido, en diversas ocasiones Olmos García ha sido acusado de nepotismo al tener incrustada a toda su familia en la nómina del ayuntamiento, en la que destacan Lizbeth y Liliana Olmos García, hermanas del munícipe, una encargada de la toma de decisiones en la Presidencia Municipal, la otra de entregar cualquier apoyo en el DIF Municipal.

Asimismo inscritos en las listas de los mejores salarios del ayuntamiento Luis Sergio Leyva Olmos, quien es su sobrino y asesor de la Presidencia; Daniel Olmos Barradas, hijo del Alcalde, quien es el encargado de atender a los proveedores –y de cobrar los diezmos por las obras–; José Luis Galindo Olmos, primo hermano del edil y su secretario particular.

En la larga fila de recomendados también se cuentan Octavio Olmos García, su hermano, responsable de las adquisiciones en maquinaria y parque vehicular; otro de sus hermanos, Roberto Olmos García, es proveedor de vehículos pesados para la Dirección de Limpia Pública municipal, mientras que su sobrina Ana Carolina Leyva Olmos se desempeña en la Dirección de Acción Social.

Por ello ha sido tomado a broma el lema del alcalde: “Somos una gran familia trabajando juntos para poner un gobierno en tus manos”.

Para Emiliano Zapata el filón que le representan los fraccionamientos residenciales que están en su perímetro, como es el caso de Animas, le permiten a su tesorería se alleguen recursos multimillonarios que van a parar a bolsillos distintos al remedio para las colonias donde hace 30 años carecen de servicios mínimos.

Y por si fuera poco los ciudadanos de ese lugar están aterrorizados por el solo hecho que pudiera implicar “heredar” la alcaldía a su “príncipe”. Pretende junto con Constantino Aguilar, heredar el cargo a su hijo Daniel Olmos Barradas, por lo que en los recorridos siempre lo acompaña, haciendo proselitismo oculto a favor de este.

Y si usted piensa que ello le preocupa a esta singular familia, pues se equivoca.

Basta echar una mirada a las redes sociales para observar la gran polémica provocada hace unos días por una fotografía donde aparece la hija del alcalde perredista en una locación de España acompañada de sus primas derrochando dinero a raudales.

Escribe Gobernantes.com que “Con todo y ser un municipio pequeño, Emiliano Zapata deja dividendos para enviar de prolongadas vacaciones a la familia, como ocurre con la hija del alcalde perredista Daniel Olmos García, la joven Diana Olmos Barradas, a quien acompañan sus primas Claudia y Ana Leyva Olmos por España, donde no sólo han visitado Madrid para ir de compras a los principales almacenes de las calles Preciados, Fuencarral, la Gran Vía, paseo de Recoletos y plazas comerciales como Xanadú, ABC Serrano y Príncipe Pío, sino también han estado en Barcelona, Valencia, Santiago de Compostela, Sevilla, Ibiza y muchos lugares más, viajando en el AVE, el lujoso tren de alta velocidad, y otros modernos transportes”.

Así, las muestras de rechazo por parte de habitantes del municipio no se hicieron esperar:

Aquí se les piden apoyos, obras, acciones, y nos dicen que no hay dinero, pero bien que la familia se va a España acompañada por un funcionario público municipal de Emiliano Zapata, quien presumiblemente va Comisionado, es decir pagado por el ayuntamiento, para acompañar y en su caso cuidar a las jóvenes turistas”.

Esa es pues, la realidad de Emiliano Zapata en donde el nombre del municipio con conjuga con el cacique perredista Daniel Olmos, quien primero muerto antes de dejar de cobrar un moche.

Tiempo al tiempo.

 

*Premio Nacional de Periodismo

Salir de la versión móvil