Le dolió al “Cachetón” Norberto Rivera que lo relegaran en la visita del Papa

Apenas se anunció la visita del Papa Francisco a nuestro país y ya el cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de México, se frotaba las manos pensando en la cantidad de negocios que podría hacer con esa visita: vendería asientos de primera fila, vendería las bendiciones del Papa, los saludos de mano, vendería las selfies y de poder vendería hasta alguna absolución, como la de Angélica Rivera y Peña Nieto quienes todavía viven en pecado. Pero no se le hizo a Norberto, porque conociendo su codicia lo dejaron fuera, pensando que si lo dejaban entrar se comería hasta los platos. Ya a unas semanas de la visita Norberto en una carta publicada en el periódico Desde la fe, Norberto Rivera se defiende de las imputaciones que hizo el Papa a los «príncipes de la iglesia»: Afortunadamente el pueblo conoce a sus pastores, y los acompaña en la construcción del Reino de Dios, al precio que sea, como ha sido a lo largo de la historia de este país… «¿O será que las palabras improvisadas del Santo Padre responderían a un mal consejo de alguien cercano a él? ¿Quién mal aconsejó al Papa?. No cardenal Rivera, al Papa lo tenían bien informado de su codicia y de su protección a curas pederastas.