Libertad Bajo Palabra

Javier Duarte, ¿quién dio la orden?

Armando Ortiz /

A la valentía de Charo Piña

En primer término, si queremos ser objetivos hay que eliminar dramatismos y dejar eso de que golpearon a los ancianitos. No fue así. Un servidor estuvo ahí y se dio cuenta de ello. Están además los testimonios gráficos de los compañeros periodistas. Eso sí, los replegaron a la fuerza y los maltrataron; ahí está la oportuna fotografía de Patricia Barradas del portal Al Calor Político, en donde se ve a un miserable policía abusivo que le puso el bastón eléctrico a un jubilado para que se retirara, después lo jaloneo; a otros maestros los empujaron hasta el tropiezo, algunos cayeron al suelo. No los agarraron a golpes como a los maestros que se oponían a la Reforma Educativa, pero si los reprimieron a la fuerza, ellos con sus toletes, bastones y armas, a unos jubilados de 60 años para arriba que sólo tenían su dignidad para defenderse.

Pero también los agredieron verbalmente. Ahí está el testimonio en video de José Luis Barradas en Youtube, donde el oficial de la policía A. Paredes G., reconocido por su gafete en el uniforme, le comenta a un empleado de gobierno: “Les dije que me los iba a llevar a los dos hijos de sus puta madre”. La maestra Rosario Piña sale al quite y pregunta “¿a quién te vas a llevar?”. “A los dos me los voy a llevar”, amenaza el oficial de la SSP y Charo Piña le dice, “pues de una vez”, le enseña las muñecas y lo exhorta: “Llévame a mí”.

Después el mismo oficial A. Paredes ordena el repliegue y los elementos de Seguridad Pública los empujan con bastones. Valiente la maestra Charo Piña toma el bastón de uno de ellos y forcejea, pero es inútil, tienen orden de replegar a los pensionados que han tomado las calles del centro de la ciudad para exigir lo que es suyo; y lo consiguen, a fuerza pero lo consiguen.

Las imágenes y los testimonios ya están dando la vuelta al país. Por supuesto los periodistas también fueron agredidos, uno que identifican como el jefe de la Fuerza Civil es rodeado por los periodistas y lo acosan con preguntas sobre quién ordenó la agresión. Es cierto, ¿quién ordenó la agresión?

Arturo Bermúdez Zurita es el secretario de Seguridad Pública, él está al mando de los elementos agresores, pero la orden también pudo venir de más arriba. Señor gobernador, ¿quién dio la orden?

Porque el que dio la orden debería dar la cara, debería ser el objeto del vituperio. Pero ¿en qué estaba pensando? Hasta las dictaduras más férreas tienen cuidado cuando de adultos mayores se trata. No es lo mismo reprimir una manifestación de estudiantes, o una manifestación de maestros disidentes, o una manifestación de campesinos, que reprimir una manifestación de adultos de 60 años para arriba.

En el México antiguo se tenía en mucho aprecio la experiencia de las personas mayores, a los jovencitos se exigía respeto a las cabezas blancas, pues se decía que uno mismo llegaría a ser como ellos.

Pero cuando un gobierno reprime a sus ancianos es que ha tocado fondo. Señores, hasta dónde los ha llevado la corrupción, hasta dónde los ha llevado la codicia, hasta dónde los ha llevado la indolencia.

Esa fuerza que usan para reprimir a los ancianos, deberían usarla para ir por los que se robaron el dinero de ellos. Usted sabe quiénes son, pero no hace nada porque su impunidad lo ha llevado a ser cómplice de ellos.